jueves, 8 de abril de 2010

Indonesia y la energía geotérmica (EFE)

Yakarta, 9 abr (EFE).- Con los mayores recursos geotérmicos del mundo y un ambicioso plan de desarrollo, Indonesia quiere atraer una avalancha de inversiones para explotar el potencial de esta energía renovable, que promete electricidad barata y menos emisiones de CO2.

El Ministerio de Energía y Recursos Minerales busca iniciativa privada que aporte hasta 12.000 millones de dólares (8.980 millones de euros) en los próximos cinco años para empezar a aprovechar los 28.100 megavatios que calcula que esconde el subsuelo indonesio.

Esta cantidad, de la que en la actualidad sólo se explota 1.200 megavatios, el 4,3 por ciento, supone entre el 35 y el 40 por ciento de los recursos geotérmicos mundiales y equivale a más de 12.000 millones de barriles de petróleo o unos 22 años del consumo energético de Indonesia o España.

Situada en el "Anillo de Fuego" del Pacífico, una zona de gran actividad sísmica y volcánica, Indonesia resulta idónea para la explotación de la energía geotérmica, que aprovecha el calor interno de la tierra.

"Únicamente hay que comparar este potencial con el de nuestras reservas de petróleo, de 6.400 millones de barriles", señaló recientemente Suchyar, jefe de la Agencia Geológica del Ministerio de Energía y Recursos Minerales.

Con los inversores en el punto de mira, Indonesia ultima estos días los preparativos de la cuarta edición del congreso de la Asociación Internacional Geotérmica, que reunirá a más de 2.500 participantes de 80 países en Bali entre el 25 y el 30 de abril.

En esta cita, el Gobierno de Yakarta pretende vender su estrategia de acción para el próximo quinquenio, un período en el que espera situarse como primer productor de energía geotérmica del mundo, por delante de Estados Unidos.

Según su plan, para 2014 Indonesia debería, con la ayuda de los inversores privados, explotar entre 4.000 y 5.000 MW de energía geotérmica, lo que supondría dejar de emitir 82 millones de toneladas de CO2 de la combustión de carbón y petróleo.

Sin embargo, algunos expertos han puesto en duda la capacidad del país para obtener tal volumen de inversiones y cumplir un calendario de actuaciones tan intenso.

A más largo plazo, el objetivo de Indonesia es alcanzar los 9.500 megavatios en el 2025, dentro de un amplio programa nacional para el desarrollo de las energías renovables, que para entonces deberían satisfacer el 17,5 por ciento de las necesidades domésticas.

Esta apuesta, liderada por el presidente indonesio, Susilo Bambang Yudhoyono, pretende por un lado terminar con el déficit eléctrico crónico del país y, por otro, introducir tecnologías poco contaminantes que limiten la importante contribución nacional al calentamiento global.

"Indonesia está en una encrucijada. Con su impresionante tasa de crecimiento -y un aumento dramático del consumo de energía- y su ambición por reducir sus emisiones de CO2, debe encontrar una forma de minimizar su dependencia del carbón", asegura el responsable de Clima y Energía del Fondo Mundial para la Natureleza en el país, Fitrian Ardiansyah.

Lograr estos objetivos, añade el activista, es imposible si no hay un apoyo desde las instituciones y grandes inversiones en energías renovables, entre las que subraya las posibilidades de la geotérmica.

Gigantes del sector energético mundial como Chevron, General Electric, Tata y Origin ya están explorando las oportunidades geotérmicas de Indonesia, e instituciones multilaterales como el Banco Asiático de Desarrollo y el Banco Mundial han iniciado procesos de financiación para su desarrollo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario